VACAS, LONGBOARDER

V A C A S ,   3 7   A Ñ O S ,   L O N G B O A R D E R

BARCELONA, 19 ABRIL 2018, 19 H

Recorre la calles de Barcelona haciendo ruido con una moto negra mate. Cruza miradas en los semáforos y despierta al vecino a las 5 de la mañana para irse a trabajar. Como buen surfer, Vacas opta por un trabajo que le deja tiempo. Crea sus tablas de surf y longboard mimando la madera. Abrió una tienda, pero ahora las vende por encargo.

Me encuentro con él en la tienda de un amigo. Por allá se le ve algunas tardes. Me saluda sentado en el escalón de la tienda. Detrás suyo, una tabla de skate con una calavera blanca coronada muerde una serpiente naranja y amenaza con su boca abierta. La moto, elegante, se inclina a su lado, aparcada junto a una pared gris hormigón, bajo un mural de latas de colores, como colocadas allí para ella: «Tu locura es mi ciencia». Acaba su cerveza y vamos a un bar. Pedimos más cerveza. Se apoya en el respaldo de la silla. Tiene la espera paciente del surfista, la presencia que te da el mar, la piel con agua salada y la mirada entrecerrada como si aún evitara el reflejo del sol. Dice que primero es serio y tajante, pero es de sonrisa abierta y sincera. No lleva adornos.

VACAS, DE BLANCO Y NEGRO

Surfeas y haces tus propias tablas

Al principio probaba marcas y hacía publicidad de longboard clásico. Hasta que empecé a hacer las mías.

¿Te inspiraste en ellas?

Bueno, me gusta tener mis propias ideas, hacerlo todo yo.

Hablas claro…

Yo siempre voy a la raíz.

Aquellas eran tablas diferentes

Sí, las primeras tablas sorprendían, eran diferentes.

¿Por qué?

Tendían a ser cuadradas, sin cantos, quilla fija de madera de balsa, de madera de Brasil, rústicas. Les hice un cóncavo para caer bien en la tabla. Al subir lo notabas mucho, conseguí que la tabla me abrazara.

Vacas crea sus propios longboards

«YO SIEMPRE VOY A LA RAÍZ»

¿Dónde las hacías?

Me hice una cabaña con palés y un toldo, esa era mi luz. Un perro pasaba horas debajo de la mesa, le caía resina constantemente y ahí se quedaba, él nunca se iba.

Háblame de tus skates

Para longskate, el bambú es una buena madera, es fuerte y elástica. Con ella hacía pruebas de resistencia muy rocambolescas.

Las tablas te dan libertad

Sí, realmente la encuentro con la tabla y viajando con la furgoneta. La moto también, es como ir a la playa. Estruendo, como una ola que cae fuerte.

¿Y cómo te manejas con la vida urbana?

Escapándome de vez en cuando. En mi vida cotidiana soy muy serio. En la playa… conecto con la naturaleza más salvaje, escucho los avisos del mar.

Cuál es el mejor lugar para vivir

Donde estás, sino te irías a otro lugar, ¿no?

Vacas un surfer rebelde

«SIEMPRE HAY QUE ESCUCHAR LOS AVISOS DEL MAR»

Y qué me dices del surfing hoy…

El mundo del surf se ha masificado. Pero eso está bien, todos disfrutamos a nuestra manera. Desde mi humilde posición ayudo en lo que puedo a los que empiezan.

¡Incluso a los perros!

Bueno, ese fue mi mejor rescate. En un campeonato, antes de una manga, me lancé a por un perro que había caído entre las rocas. Siempre he querido ser bombero, pero la espalda no me dejó. Después de una operación, mi gran motivación fue ver el mar a través de un ventanal al final del pasillo del hospital. Caminar para verlo fue lo que me motivó a seguir.